lunes, 1 de octubre de 2007

Compartición y cybervigilancia

El artículo ya tiene tiempo, pero me resulta interesante ponerlo aquí.

Lo que algunos han llamado "compartir2.0" se nos echa encima y, si bien puede llegar a ser un problema de cara a gente que quiera utilizar el sistema para redes de pedofilia u otras formas de cyberdelito, también hace que muchos tengamos buenos augurios: con tecnologías como estas la compartición de la cultura será a partir de ahora mucho más fácil de lo que había sido nunca, y ni siquiera en sociedades donde estas prácticas estaban prohibidas, como la estadounidense, los usuarios podrán ser detectados por las autoridades.

Según un estudio comentado en 20minutos.es y realizado physorg, un usuario inexperto no tiene esperanzas de permanecer en el anonimato: continuamente se le está rastreando para comprobar si está infringiendo licencias de copyright.

Realmente desalentador. Al menos en España no tenemos que preocuparnos por acabar en una celda de protección oficial por el tema de las descargas del eMule y similares. EEUU sí que es un país de armas (nunca mejor dicho) toma para esas cosas.

Un disco duro universal como Omemo, tal y como se cuenta en el primero de los artículos, puede resultar un gran avance para el P2P.

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