miércoles, 20 de junio de 2007

House y Foreman: como padre e hijo mutuamente incomprendidos

Si. Eso es lo que pienso después de ver el episodio de hoy.
Foreman decide presentar su dimisión tras constatar que no quiere convertirse en alguien parecido a House. Cuddy no quiere que se vaya. Wilson tampoco. Pero House no parece dispuesto a hacer nada por evitarlo. Y es entonces cuando Chase hace un descubrimiento sorprendente: lo que ocurre es que House también se siente incómodo hablando del tema.

Eso es. House es orgulloso. Hasta la médula. Hasta el final. El mismo orgullo que hace que nunca pida perdón por nada, ni siquiera cuando se ha metido en un gran lío. Es la hiperconfianza en sí mismo dada por el hecho de que sea un médico extraordinario. Y en realidad, tiene un cierto sentimiento de inferioridad, por el hecho de que es cojo, y además eso le hace sufrir intensamente, lo que le lleva a ser drogadicto. Es más débil de lo que parece, en el fondo, por eso se esfuerza en demostrar que todo le da igual, hasta el punto de convencerse a sí mismo.

Y en realidad aprecia a Foreman. Y no se esperaba lo que iba a suceder. Durante el capítulo se pueden ver algunos careos en los que Eric intenta tirar de la lengua a ese implacable doctor que no se dejará doblegar, para seguir vendiendo la imagen que ha vendido durante todo este tiempo. Es todo por cuestión de orgullo, tanto por una parte como por otra. Un leitmotiv por ambas partes bastante manido en los argumentos de muchas historias. Dado el camino que ha tomado el argumento, es poco previsible que House vaya a capitular. Y es poco probable que Foreman se eche atrás por lo que le digan sus compañeros de trabajo. Otra cosa es que Eric se pueda echar atrás, como ya ha pasado otras veces, al tener un nuevo caso en el que House consigue salvar a un paciente contra todo pronóstico, y Eric recuerde entonces que, aunque a veces ese extremadamente frío personaje se comporta de forma poco ética, salva más gente que muchos que no lo hacen, precisamente por esa frialdad, e incluso por esa falta de ética.

Por mi parte, creo que el personaje de Foreman todavía no está totalmente agotado, así que probablemente no se haya previsto que su salida vaya a ser definitiva, cosa que ya pasó en su día, por ejemplo, con Cameron. Quien quiera que lea esta entrada puede hacer sus apuestas

2 comentarios:

Unknown dijo...

Yo creo que sí está agotado. Sencillamente, porque así se da un "nuevo" aire a la serie como tal: el argumento inicio-paciente se rompe-enfemedad rara-House & Cía. lo resuelven por los pelos-moraleja de turno, está empezando a cansar. Con la partida de uno, se abre la de los otros. Y eso conlleva la entrada de nuevos personajes. No digo de nuevas tramas, digo personajes.

Y cabe destacar que, habiéndome informado por las malas lenguas e Internet, se rumorea que la vacante de Foreman la ocupará una nutricionista...

Y, ¿el juego que dará Foreman como guest starring en futuros capítulos? ¿Posible Foreman, MD, tipo Aída?

La tele está inventada. Sólo hay que escoger una opción u otra. Y más que habrá que no he dicho...

David dijo...

Vaya, se agradece el comentario. Y me aporta información que no conocía. Tal vez tengas razón. Aunque a nivel del personaje de Foreman, si lo van a hacer así, no me acaba de gustar su salida. Se me antoja muy repentina. Todo está ocurriendo en unos pocos episodios, y en realidad tal vez sea suficiente, pero a mi se me hace poco para dar la despedida a un personaje que ha sido de los principales durante tres temporadas.

El tiempo dirá.